EL RECUERDO
LA MIRADA de Paco Vargas
José Monge Cruz (San Fernando, 5 de diciembre de 1950 - Badalona, 2 de julio de 1992) |
Más que cante es dolor negro, pena grande, grito de su gente y vida; porque aunque no esté sigue siendo, será siempre. Nadie antes que él, nadie como él, aun sin pretenderlo, dejó una estela indeleble y única para los que andan los caminos del cante, aunque se me antoja que tan intensa luz ha cegado los sentidos de quienes sólo ven un árbol en tan inmenso y variado bosque.
El cante flamenco es Camarón pero no sólo Camarón. Ése es el error de tantos jóvenes artistas que se han quedado en las afueras, en el soniquete fácil y dulzón, y no han querido, o no han podido, entrar en las entrañas mismas de la expresión flamenca del cantaor más singular y más asequible, más fácil y más complicado que ha dado la historia de la música flamenca.
Decir que Camarón le ha hecho mucho daño al flamenco –escrito está- es una barbaridad, una provocación premeditada y analfabeta. Pero asegurar que no nacerá otro como él –también está escrito- es una exageración, motivada más por la pasión que por el análisis meditado y riguroso. Y, sin embargo, ambas posturas no son sino el reflejo de las pasiones que suelen concitar los genios: ante ellos no caben las medias tintas, no sirven las actitudes ambiguas, porque en la indecisión uno se quema o es rechazado.
Ir a contracorriente en este tema, como en todas aquellas en las que las pasiones se posicionan en bandos encontrados, es arriesgarse a ser tachado de “tonto del pueblo” o, lo que es peor, de “flamencólico”, horrendo palabro salido del inculto diccionario de quienes confunden al analista serio con el juntaletras indocumentado, que escribe más por lo que desconoce que por lo que estudia. Pero sobre todo de quienes no aceptan la crítica seria y argumentada, porque no saben distinguir entre la adopción de una estética determinada y la asunción de lo verdaderamente importante.
Camarón ha dejado herederos sin cuento: José Parra en Málaga, Potito en Sevilla, Diego “El Cigala” en Madrid, o Duquende en Barcelona, son ejemplo no limitativo de lo afirmado, sin entrar en la evidente influencia que ejerce su estética sobre artistas como José Mercé, Juan Moneo “El Tortas”, Enrique Lozano “El Pescao”, Remedios Amaya, o José Manuel Ruiz Rosa “El Chino” -siempre llorado y recordado por los que tuvimos la suerte de conocerlo-, todo ellos artistas singulares y únicos al margen de su mayor o menor popularidad. Y que no son los únicos puesto que podríamos citar algunos más cuyos nombres todos tenemos en mente.
Sin embargo, ¿cuántos de los que se declaran camaroneros y adoptan hasta su forma de vestir y ser –entre otras razones, porque si no de qué iban a vivir- conocen la obra del mítico cantaor? ¿De verdad saben que lo que Camarón hizo no fue sino interpretar a otros artistas cuales son Juanito Mojama, Isabelita de Jerez, La Perla de Cádiz, Antonio “El Chaqueta”, “El Rubio”, Antonio de la Calzá, etc.? Sinceramente, creo que no. Porque si no es difícil de entender cómo sus etéreas figuras se van diluyendo, cual efímero azucarillo en el agua, conforme su soniquete prosaico y ramplón va cayendo en el pozo del olvido por cansoso y aburrido.
La influencia de Camarón -antes y después de su muerte- es innegable. Y su estela, ancha y luminosa, se pierde en el infinito. Sin él, el cante flamenco hoy sería otra cosa: no peor, pero quizá sí más pobre artísticamente. Su aparición en los entresijos del arte flamenco es el inicio de un antes y un después claramente perceptible en los anales de la historia del tercio final del siglo XX. Su caso es único en la Historia del flamenco. Su cante fue el uniquito capaz de ponernos a todos -bueno, a casi todos- de acuerdo, fuera el que fuera el gusto particular de cada uno. Su sola presencia era razón suficiente para convocar a gitanos y no gitanos, a viejos y jóvenes, a entendidos y neófitos, a mujeres y hombres, a intelectuales y analfabetos...Todos buscando su voz de siglos, siendo tan joven. Todos en busca de su sonío, que embriagaba y nos transportaba hacia la catarsis colectiva. Todos a la búsqueda de su dolor y de su alegría, que secaba la boca o invitaba al baile. Todos, en fin, temiendo que su frágil corazón de niño grande se rompiera de pronto y nos dejara con la miel en los labios.
Camarón, no cabe duda, fue el líder indiscutible del cante fácil y asequible, sin dejar de ser flamenco ni traicionar la fidelidad a sus raíces más primitivas: Camarón nació, vivió y murió gitano. Toda su obra es pura recreación, un ir siempre por delante del propio cante, un intento continuado -aun sin saberlo- de escapar de un pasado que le pesaba como una losa. Camarón es libertad creadora, explosión descontrolada del grito colectivo de su gente. Camarón es ayer, hoy y mañana; espejo, guía y luz de los que son y serán. Si Mairena fue restauración, Camarón, definitivamente, es revolución. Camarón era y es más grande que el flamenco que lo parió.

Perfil biográfico [1]
José Monge Cruz nació en la localidad de San Fernando, en Cádiz (España), el 5 de diciembre de 1950, en la Calle Carmen, en el barrio conocido popularmente como "Las Callejuelas". Hijo de Juana Cruz Castro y Juan Luis Monge Núñez, fue el penúltimo de ocho hermanos de familia gitana. El apodo por el que es conocido le fue dado por un tío suyo, de nombre José, debido a su delgadez, pelo rubio y piel blanca, que en su opinión le hacían parecer un camarón. Por otro lado, la ciudad de San Fernando se halla ubicada en la Isla de León, por lo que es conocida como la Isla, topónimo que Camarón añadiría a la segunda parte de su apodo para formar su nombre artístico.

En 1955 a la temprana edad de cinco años actuó por primera vez en una compañía que montaba una escuela llamada Los Hermanitos en San Fernando. Con doce años, 1962, gana el primer premio del Concurso Flamenco del Festival de Montilla (Córdoba). Empieza a extenderse su fama y se inicia como profesional en el mundo del cante en compañía de su mejor amigo de entonces, el cantaor Rancapino. Juntos frecuentan las ferias más importantes de Andalucía, demostrando su arte en las casetas en las que actúan. A partir de entonces canta junto a Dolores Vargas y la Singla, entre otros, y hace varias giras por Europa y América enrolado en la compañía de Juanito Valderrama. En 1966 gana el primer premio en el Festival del Cante Jondo de Mairena del Alcor y posteriormente se traslada a Madrid con Miguel de los Santos.
En 1968 Camarón llega a ser fijo en el tablao de Torres Bermejas de Madrid, donde permanecería durante doce años acompañado a la guitarra por Paco Cepero. Su nombre comienza a ser cada vez más conocido y participa en la película Casa Flora, protagonizada por Lola Flores. En Torres Bermejas conoce al guitarrista Paco de Lucía, con el que grabaría nueve discos entre 1969 y 1977, dirigido por el padre del tocaor, Antonio Sánchez Pecino, en los que también colabora el hermano de Paco, Ramón de Algeciras. Durante esos años se produce su evolución como cantaor, pasando de un estilo ortodoxo a otro más personal. Su primer disco, El Camarón de la Isla con la colaboración especial de Paco de Lucía, título que Sánchez Pecino repetiría durante los siguientes álbumes para preservar la carrera de su hijo como solista, supuso el principio de una revolución musical, y los tangos extremeños Detrás del tuyo se va incluidos en este disco fueron el primer éxito del dúo.
Rancapino, Camarón, La Chispa. Curro Romero y Paco de Lucía |
En 1976 contrae matrimonio con Dolores Montoya, La Chispa, con la que tendría cuatro hijos. La boda se celebró en la localidad de La Línea de la Concepción, apadrinado por su hermano Manuel y la bailaora Manuela Carrasco. En 1979, bajo el nombre de Camarón, sin la referencia a su ciudad natal, publica La leyenda del tiempo, disco que supone una auténtica revolución en el mundo del flamenco al incluir sonoridades propias del mundo del jazz y el rock. En él hay varias adaptaciones de poemas de Federico García Lorca con música de Alameda, que fueron coproductores del álbum, además de Ricardo Pachón, Kiko Veneno y los hermanos Rafael y Raimundo Amador. A partir de este momento comienza su colaboración con el guitarrista Tomatito y se desvincula por un tiempo de Paco de Lucía.
En 1986 es condenado a un año de prisión menor por un delito de imprudencia temeraria con resultado de muerte tras un accidente de circulación en el que fallecieron dos personas. El cantaor no ingresó en prisión por carecer de antecedentes penales. En mayo de 1987 actúa tres días seguidos en el Cirque d'Hiver de París con un éxito absoluto.
En 1989 graba Soy gitano, el disco más vendido de la historia del flamenco, en el que colabora el guitarrista Vicente Amigo. De 1992 data el último disco publicado en vida de Camarón, Potro de rabia y miel, que contó con las guitarras de Paco de Lucía y Tomatito. La grabación de este disco tuvo que ser interrumpida debido al diagnóstico de un cáncer de pulmón, ocasionado por su grave adicción al tabaco, que, junto al consumo de drogas, acabaría con su vida unos meses después, tras viajar infructuosamente a Estados Unidos en busca de una posible cura.
El 2 de julio de ese mismo año falleció en Badalona (Barcelona) a la edad de 41 años, causando una gran conmoción social (reflejada en el lema "Camarón vive"). Fue enterrado en su localidad natal de San Fernando. Su féretro fue envuelto con la bandera gitana.
Su vida fue llevada al cine en 2005 por el director Jaime Chávarri en la película Camarón, protagonizada por el actor Óscar Jaenada y la actriz Verónica Sánchez.
Premios
Primer premio en el Festival del Cante Jondo de Mairena del Alcor.
Premio en el Concurso de Cante Jondo Antonio Mairena, 1973.
Premio Nacional de Cante de la Cátedra de Flamencología y Estudios Folclóricos Andaluces de Jerez, 1975.
Trofeo Lucas López de la Peña Flamenca El Taranto de Almería, 1984.
IV Llave de Oro del Cante Flamenco, 2000 (a título póstumo).
Otros reconocimientos obtenidos por Camarón incluyen: Hijo Predilecto de San Fernando (1992), Medalla al Mérito Artístico del Ayuntamiento de Madrid, Medalla de Oro de Andalucía, Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes, Hijo adoptivo de la ciudad de La Línea de la Concepción...
Discografía
Al verte las flores lloran (1969)
Cada vez que nos miramos (1970)
Son tus ojos dos estrellas (1971)
Canastera (1972)
Caminito de Totana (1973)
Soy caminante (1974)
Arte y majestad (1975)
Rosa María (1976)
Castillo de arena (1977)
La leyenda del tiempo (1979)
Como el agua (1981)
Calle Real (1983)
Viviré (1984)
Te lo dice Camarón (1986)
Flamenco vivo (1987)
Soy gitano (1989)
Potro de rabia y miel (1992)
Recopilatorios y discos póstumos
Disco De Oro (1988)
Autorretrato (1990)
Una Leyenda Flamenca (1992)
Camarón Nuestro (1994)
Antología (1996)
1. Fundamentos
2. Grandeza
3. Apoteosis
París 1987 (1999)
Rarezas (1999)
Legends Of Flamenco (1951-1992) (1999)
Antología Inédita (2000)
Alma Y Corazón Flamencos (2004)
Venta De Vargas (2005)
Camarón La Película (Banda Sonora Original) (2005)
Reencuentro (2008)
La Chispa De Camarón (2009)
Camarón guitar tab con voz (2009)
[1] Fuente: Wikipedia